Cómo El Estrés Y La Ansiedad Pueden Afectar La Incontinencia

nov 02, 2022 | 2 minutos Leer

Muchacho sentado en el lugar escribiendo con un lápiz

Unas notas malas en el colegio, mudarse a otra ciudad, sentirse rechazado en un equipo o club o una enfermedad en la familia son algunos de los principales factores de estrés que pueden experimentar los niños durante su crecimiento. Estas situaciones pueden afectar a los sentimientos del niño sobre su persona y a su comportamiento en el día a día.
Los padres de los niños que aún mojan la cama suelen plantearse si el estrés es el origen de este problema. Según los urólogos y las publicaciones médicas, probablemente esa no sea la causa. Parece ser que, en el caso de la incontinencia nocturna, todo apunta a una causa genética (transmitida entre las familias) y a que las señales entre el cerebro, los nervios y los músculos de la vejiga aún no han madurado del todo. Con el tiempo, a medida que la vejiga crece y los músculos se fortalecen, la incontinencia nocturna casi siempre acaba por desaparecer de manera natural.

El Estrés Y la Ansiedad Por Sí Mismos No Provocan Que Un Niño Que Nunca Mojó la Cama Empiece a Hacerlo.

No obstante, el estrés puede contribuir de forma indirecta.
El estrés emocional y psicológico pueden ocasionar que un niño se comporte o actúe de forma diferente y acabe mojando la cama.Ten en cuenta que es el cambio en el comportamiento del niño causado por el estrés, y no el propio estrés, lo que contribuye a la incontinencia nocturna.
Por tanto, si tu hijo prácticamente no mojaba la cama, pero de repente empieza a hacerlo, busca la causa en razones no solo médicas, como una infección o diabetes; pregúntate si su comportamiento cambió por algún nuevo factor de estrés en su vida. 
Por ejemplo, los niños con mucho estrés no pueden dormir bien. Sus rutinas diarias, como la comida y las idas al baño, también pueden alterarse. A causa de esto, cuando por fin caen rendidos, el sueño es más profundo, lo que provoca la incontinencia nocturna.
Es muy importante tratar la causa subyacente del estrés de tu hijo de forma comprensiva y servicial. También deberías ayudar a tu hijo a mantener sus hábitos y rutinas diarias, incluso si se muestra reacio. Además, puede ser útil relacionarte con otras familias en la misma situación. Saber que la incontinencia nocturna es común y normal puede ser de gran ayuda para aliviar las preocupaciones de tu hijo hasta que se resuelva el problema. 
Mientras tú y tu hijo mejoran su rutina para no mojar la cama durante la noche, puede que sea útil usar productos absorbentes desechables, como la Ropa Interior Nocturna Goodnites® o las Mantas de Cama Goodnites® para protegerlo de posibles filtraciones. Utiliza la ropa interior nocturna n.º 1 para reducir tus preocupaciones y dejar que tu hijo sea un niño.

 


Estos artículos no son un sustituto de la opinión médica, consulta a tu médico según sea necesario.